MOTIVOS QUE IMPULSAN ALABANZA
«Bendito sea Dios, Que no ha desechado mi oración, Ni ha apartado de mí Su misericordia.»
Salmos 66:20
Siempre existen motivos de agradecimiento a Dios, no hay un solo día en el cual pensemos que no hay algo en que darle gracias. El Salmo 66 finaliza con 2 motivos que el autor resalta para bendecir a Dios y merecen nuestra atención esta semana.
1. “No ha desechado mi oración”: esta frase aunque parece superficial es más profunda de lo que a simple vista leemos. Creo que la manera más sencilla de entenderla es recordar muchas de nuestras oraciones “apuradas/urgentes/superficiales y hasta a veces sin sentido”, pero aun así haber recibido respuesta de Dios y su gracia en haber escuchado y recibido nuestras plegarias.
2. “Ni ha apartado de mí Su misericordia”: El amor de Dios es una fuente inagotable y Él la demuestra por medio de sus misericordias que se renuevan cada día (Lm 3:22-23). Su amor hacia nuestras vidas es un amor perfecto y verdadero que no cambia y que permanece para siempre. La escucha de Dios y la aceptación de nuestras oraciones son el reflejo de su misericordia en acción.
Estos 2 motivos deben ser para nosotros un impulso a seguir acercándonos a este Dios misericordioso que atiende nuestro clamor una y otra vez. Al igual que el Salmista debemos de abrir nuestra boca y bendecir a Dios por su favor inmerecido y todas aquellas bendiciones que día a día recibimos de parte de Él.
Nuestra boca sea llena de alabanzas que exaltan y glorifican su nombre.
Te invito a considerar esta verdad al meditarla en tu corazón y puedas expresar:
“Bendice alma mía a Jehová y no olvides ninguno de sus beneficios” (Sal 103:2).
Bendecida semana, Pr Denis.
Comentarios
Publicar un comentario